Vicente Pascual nace en Zaragoza el 20 de septiembre de 1955. A los dieciséis años inicia su primera práctica creativa, el trabajo en posters con un fuerte contenido político-crítico, y a los pocos años, en 1972, forma con su hermano Ángel “La Hermandad Pictórica”.
En 1975, tras una larga estancia en Pushkar, Rajhastan, Vicente descubre los escritos de Frithjof Schuon y Ananda K. Coomaraswamy, cuya perspectiva filosófica perennialista influye de forma definitiva en su concepto del arte. Desde este momento su práctica —enmarcada en el nomadeo, con su compañera de vida Ana Marquina y su hija Cira, que le lleva de Rasal a los pies de los Pirineos, a Almagro en La Mancha, a Ontinar y Montmesa en los llanos aragoneses, a Moscari y Campanet en la Tramuntana mallorquina— queda fuera de las corrientes hegemónicas en el arte contemporáneo, asumiendo planteamientos platónicos muy olvidados dentro de las pautas dominantes del pensamiento postmoderno.